Manual para colocar papel pintado
En la decoración de tu hogar o negocio a veces no basta con una buena mano de pintura, a veces necesitamos algo más vivo, más colorido o con relieves. Aquí es donde entra el papel pintado, ya que existen cientos de miles de tipos de papel con los dibujos, e incluso imágenes para adaptarse a lo que buscamos.
Hace 30 años el papel estaba de moda y se colocaba en una o varias estancias de la casa, preferiblemente salones, por su elegancia a la hora de decorarlo con muebles antiguos de madera maciza. Este tipo de papel, que era más grueso y difícil de colocar que el de ahora, se colocaba en toda la estancia. En algunos casos incluso en el techo y todas las paredes creando así un ambiente excesivamente cargado pero aceptado para los gustos de la época.
Hoy en día vuelve a tener bastante auge y se vuelve a colocar papel en las viviendas particulares. La diferencia esta vez radica en que se coloca en las habitaciones y solo en una o dos paredes de la estancia, dejando el resto con pintura en tonos a juego con el fondo o el dibujo del papel pintado elegido.
Materiales necesarios para colocar papel
- Papel escogido
- Cola especial para papel
- Caldero para mezclado de cola
- Escalera
- Brocha cuadrada para extender cola
- Cepillo alargado para alisar papel
- Cuchilla con hojas nuevas
- Esponja o bayeta para limpiar y cubo
Escoger el papel
Llegado el momento de decidirse por un papel para su colocación, los consejos a este respecto son pocos, ya que todo depende de los gustos de cada uno, la estancia en la que queremos ponerlo o los colores que tenemos pensado para esa habitación o estancia.
Lo primero es medir los metros cuadrados de pared, para ello, con un metro medimos el ancho y el alto y multiplicamos las dos medidas entre sí. Esta será la medida que necesitaremos a la hora de comprar los rollos de papel.
El papel suele venir en rollos de 10,05 metros de largo por 53 centímetros de ancho, lo que es igual a 5,30 metros cuadrados aproximadamente. Hay que tener en cuenta que vamos a tener algo de desperdicio a la hora de cortar y pegar las tiras de papel pintado, así que es mejor pedir un rollo de más que quedarnos cortos.
También tenemos que tener en cuenta que hay papales que deben ser casados con la anterior tira colocada, debido al dibujo que traen. Este tipo de papel suele tener un desperdicio de hasta 50 centímetros en cada tira colocada. Esto se indica en el catálogo de la marca del papel y se debe tener en cuenta a la hora de pedir los rollos.
Si es la primera vez que colocas papel vas a poner alguna tira mal o te va a romper, por lo tanto, es mejor tener papel de sobra que dejar el trabajo a medias mientras encargas otro rollo más.
Esto tiene dos inconvenientes importantes y es que mientras esperas por el papel que te falta, las tiras que tienes colocadas inician el secado y las nuevas que pongas tendrán un secado desigual y podría notarse la diferencia.
También corremos el peligro de que el nuevo rollo sea de una tanda diferente que pasó por la impresora de la empresa unas semanas después y los colores podrían diferir del papel ya colocado.
Primer paso, preparar la pared
Antes de colocar el papel tenemos que preparar la pared en donde se vaya a colocar. Estas deben estar bien lisas y sin agujeros ni imperfecciones, puesto que si se coloca el papel con la pared en mal estado se notarán después en el papel. Dado que este material suele ser muy fino, casi todos son de un grosor igual a un folio, un solo bultito en la pared se notará en el resultado final.
Para ello debemos lijar bien la pared, tanto si es nueva y no tiene pintura, como si ya tiene unas manos de pintura. En caso de que tenga relieves, concavidades u otros desperfectos debemos repasarlas o pastear toda la pared si no está perfectamente lisa.
Las paredes sin pintar deben recibir una mano de fijador y otra de pintura y las ya pintadas al menos una capa del mismo color que el fondo del papel pintado. De esta manera conseguiremos que, si el papel no nos queda bien colocado, y se nos separa una pieza de otra no se notara la diferencia, al verse el color de fondo de la pared igual que el del papel.
También es recomendable cubrir con cinta de pintor la madera de zócalos y marcos de puertas, para no mancharlos con la cola de pegar el papel. El suelo circundante donde vayamos a trabajar debe ser protegido.
Los enchufes eléctricos hay que desmontarlos, al menos la tapa exterior que recubre el dispositivo. Por supuesto todos los objetos que estén en la pared como cuadros y radiadores que también deben ser vaciados y desmontados.
Preparación del papel y la cola
Una vez tengamos escogido el papel que queramos colocar llega el momento de la verdad, hay que empezar a pegar el papel. Lo primero es preparar la cola, normalmente viene en un envase de cartón pequeño, y se debe mezclar con agua en una proporción que se especifica en las instrucciones. Según el tipo de papel que vayamos a pegar, fino, pesado o vinílico tendremos que hacer la mezcla en diferentes proporciones. Hay que dejarlo reposar unos 10 minutos antes de empezar a aplicarlo.
Tenemos que saber cómo se debe pegar el papel, encolando el papel y dejando que se ablande 5 minutos o como se hace en los papeles más modernos, encolando el trozo de pared donde va a ir la primera tira y luego pegar el papel encima. Esto debe indicarlo en las instrucciones que deben estar en el paquete que envuelve el rollo.
Empezaremos a colocar el papel desde una esquina, da igual de izquierda a derecha o viceversa y de arriba abajo. Las tiras siempre deben llevar el mismo sentido al desenrollarlas y luego pegarlas.
Empezando a colocar el papel
Una vez que tenemos todo preparado hay dos maneras de proceder a la colocación del papel pintado, todo depende del sistema de encolado del mismo.
Encolado en el papel: Si las instrucciones indican que debemos encolar el papel primero antes de pegarlo, procedemos a cortar una tira de la medida del alto de la pared, pero con un sobrante de unos 7 u 8 centímetros. La colocamos en el suelo o en una mesa donde previamente hayamos tapado con un plástico o papeles de periódico y empezamos a encolar por detrás con una brocha de cabeza cuadrada y ancha. Encola desde una esquina y no dejaremos ninguna zona sin cola puesto que al colocarlo se hinchará hacia fuera y quedará un bulto.
Luego la doblamos desde una esquina a la otra sobre sí misma y dejamos que se ablande el papel unos 5 minutos. En este tiempo puedes ir cortando otra tira y preparándola si tienes sitio, acuérdate de que este en el mismo sentido que la anterior.
Una vez pasados los 5 minutos la cogemos por una esquina con mucho cuidado y la desprendemos de sí misma un poco, nos subimos a la escalera y la colocamos en la esquina con mucho cuidado para que quede a paño con ella, dejaremos unos centímetros hacia arriba para luego cortar con una cuchilla.
Con un cepillo de cerdas blandas, puede servir una escoba nueva sin mango, aplicamos presión desde el centro del papel hacia los lados y vamos bajando. Debemos prestar especial atención a que no queden arrugas ni burbujas de aire. Si no eres capaz de alisarlo bien, sácalo y vuelve a empezar, pero con mucho cuidado porque el papel estará muy blandito.
Una vez lo tengas en su posición y bien centrado y alisado, recorta con la cuchilla la parte superior contra el techo y la parte inferior contra el zócalo. Con extremo cuidado porque podría romperse en vez de cortarlo, para ello la cuchilla debe estar nueva.
Colocar la siguiente tira ya es más complicado sobre todo si es de casar al tener dibujos continuos, debes encontrar el punto de casado y empezar a unir desde ahí. Para los demás papeles tendrás que alinearlo perfectamente con el borde del anterior e ir bajando lentamente llevando las burbujas y arrugas hacia el lado contrario a la unión con la tira anterior.
En caso de tener una llave de la luz o un marco de puerta debes empezar a cortar a base de ir aplastando el papel contra su borde y cortar por el pliegue. Siempre después de haber pegado el papel hasta la altura del sitio a cortar.
Encolado en la pared: Este trabajo de colocado es más sencillo ya que al encolar la pared, el papel está un poco más rígido y menos pegajoso.
En este caso encolamos solo el trozo donde ira la tira colocada, cortamos la medida que nos hace falta y empezamos desde arriba y procedemos igual que lo explicado en el otro papel.
Los cortes son mucho más fáciles y no se producen tantas burbujas y arrugas, además es más fácil de remover y volver a reposicionar. Por el contrario, es mas complicado adaptarlo a esquinas de pared donde queramos continuar con el papel.
Es importante que al terminar de colocar una tira de papel pintado usemos la esponja o bayeta para limpiar la cola en el techo u otras partes que no estén protegidas y se hayan manchado.
No dudes en pasar el cepillo cuantas veces haga falta por el papel para alisarlo lo mas posible y sobre todo que no queden burbujas. Limpia con la esponja las uniones entre papeles por si se ha escurrido alguna cola, esta al secar queda con algo de brillo y se notará encima del papel u otras superficies.
Acabado final
Una vez esté acabada la colocación del papel y tengamos todo limpio y bien cortado llega la hora de repasar todas las tiras para comprobar que no quede ninguna burbuja de aire o arruga. Esto puedes hacerlo pasando la mano con la cara pegada al papel para ver las imperfecciones. También puedes usar una luz, como una bombilla y cable portátil cerca de la pared revelará todos los fallos.
Ten en cuenta que, sobre todo el papel que hay que encolar por detrás siempre va a quedar con muchas mini arruguitas y algunos bultitos minúsculos. Esto es normal, hasta que se produzca el secado de la cola que esta por detrás y hace que quede ese efecto en el papel. Una vez seca, quedara liso y perfecto.
Si todo ha salido bien tendrás un precioso papel pintado muy decorativo y estéticamente muy moderno.
Puedes ver algunos ejemplos de papel ya colocado en este enlace.
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